Desdibujando las líneas entre la realidad, el cuento de hadas y la fantasía de la isla misteriosa.
Es Vedrà, la enigmática roca llena de misterio que surge en la costa sureste de Cala d’Hort en Ibiza, tiene una historia más histórica que la icónica Isla Blanca. ¡Si eso es posible! No importa cuál sea tu postura en torno a la maravilla de 382 metros de altura y su excedente de sagas subjetivas… la fascinante protuberancia piramidal simboliza muchas cosas para muchas personas, incluido yo mismo.
Misterio, historia y Hollywood
Se dice que Es Vedrà es el tercer lugar más magnético de la Tierra, por detrás del Polo Norte y el Triángulo de las Bermudas. Los geólogos dicen que no. Los hippies y los espirituales dicen que sí. Afirman que la concentración de alta energía y las propiedades curativas que experimenta la gente proceden de ráfagas de fuerzas positivas que irradian de grandes cantidades de piedra caliza, comparables a las de la Isla de Pascua, las Pirámides y Stonehenge. Otras dos creencias que circulan hacen remontar su ADN a ser la punta de la Ciudad Perdida de la Atlántida y, en segundo lugar, dicen que fue el lugar de nacimiento de Tanit, la diosa fenicia.
El siguiente misterio surgió cuando todos los instrumentos de navegación se extraviaron de repente al acercarse al islote y se informó repetidamente de extraños destellos de luces que se movían rápidamente, como los ovnis. Aunque empezó a ocurrir durante la época hedonista de los años setenta, la teoría tiene credibilidad gracias a los innumerables testimonios de pescadores locales y a las numerosas pruebas aportadas por pilotos. Un ejemplo es el muy sonado incidente ovni de Manises en 1979, cuando ni la torre de control ni el radar militar pudieron identificar una serie de rayos rojos que impactaron contra un avión de Transportes Aéreos Españoles, obligando finalmente al avión a realizar un aterrizaje de emergencia en Valencia, en la península.
Existen otras conexiones más concretas que vinculan Es Vedrà de la mitología histórica griega a Hollywood. En primer lugar, en la Odisea de Homero se afirmaba que era el hogar de las míticas sirenas que atraían a los marineros a la muerte, y “recientemente”, en 1958, aparecieron imágenes de la silueta en el musical South Pacific, donde sustituía a la isla volcánica Bali Hai.
El innegable vínculo de Es Vedrà con la naturaleza y la navegación
¿Es Es Vedrà magnético, parte de la civilización hundida de la Atlántida o un patio de recreo para extraterrestres? Tú decides. Sin embargo, lo que es innegable hoy en día es su importancia como zona de reserva natural para los animales y como popular destino de navegación para los bon vivants que veranean en sus grandes barcos.
Desde 2002, está catalogada como biosfera estrictamente protegida y llena de auténticos tesoros naturales. La fauna campa a sus anchas y es fácil avistar una gran variedad de aves acuáticas, cabras y lagartos, incluida la subespecie endémica de lagarto ibicenco. También abunda una gran variedad de especies vegetales; hasta la fecha se han identificado 166.
Puede que Es Vedrà florezca todo el año de fauna y flora, pero durante el verano son los mares circundantes los que se llenan de superyates y lanchas rápidas. Los veleros también se han sumado recientemente a la escena gracias, en parte, a la Ibiza JoySail Regatta, creada hace dos años.
Ibiza JoySail fue una visión fundada por STP Palma y Marina Ibiza para dar la bienvenida al mundo de la vela al punto caliente hedonista dominado por los megayates. Sancionada por SYRA y ORC, se ha convertido en una divertida regata anual a través del archipiélago balear, con Es Vedrà como punto culminante de su ventoso itinerario. La participación de la comunidad de regatistas profesionales sigue creciendo; este año, competidores internacionales como el Bliss, el Hyperion, el Moat y el Swan han participado en la regata.
En cuanto a los que no somos navegantes… echar el ancla en Es Vedrà es algo que hay que tachar de la “lista de deseos de los navegantes”. Su aura mágica no sólo conmueve el horizonte, sino también el corazón. Al llegar, Es Vedrà hipnotiza. A la salida, energiza.
Consejo de viaje: Al ser uno de los lugares que más aprecio en este planeta Tierra, dos recomendaciones personales, además de visitarlo como destino en yate en una excursión de un día, son reservar un asiento en la ventanilla derecha si se llega en avión (para la mayoría de los vuelos, no puedo garantizar todos los itinerarios aéreos) para disfrutar de unas vistas fabulosas desde arriba, y alquilar una moto acuática (desde Cala Vadella o Cala d’Hort) para acercarse lo máximo posible a la mole monumental de visita obligada.