Benetti presenta el Motopanfilo 37M y el FB284, dos nuevas obras maestras con características innovadoras en términos de espacio y funcionalidad.
Benetti se proyecta hacia el futuro y desvela un avance. Durante una conferencia de prensa virtual, en consonancia con los tiempos que corren, el famoso astillero de Viareggio presentó dos nuevos modelos que representan dos grandes pasos hacia el futuro de la náutica de lujo: el Motopanfilo 37M, perteneciente a la categoría Class, y el FB284, un megayate personalizado de 67 metros.
Apenas unos meses después de la presentación de otros dos yates revolucionarios, el Oasis 40M y el Diamond 145, Giovanna Vitelli, vicepresidenta del Grupo Azimut|Benetti, ilustró con orgullo la ruta que la empresa pretende seguir de aquí en adelante. Un camino descrito simbólicamente por los dos nuevos modelos, el Motopanfilo 37M y el FB284, diferentes entre sí pero unidos por los cuatro puntos cardinales de la marca: innovación, fiabilidad, capacidad de construcción y valorización del patrimonio.
Ambos fueron narrados directamente por los diseñadores de los proyectos, acompañados por Sebastiano Fanizza, Director de Ventas de Benetti, y Federico Lantero, Director de Marketing y Comunicaciones.
Motopanfilo 37M: cuando lo clásico se une a lo vanguardista
El primer modelo que se desveló al público online fue el Benetti Motopanfilo 37M, un proyecto concebido como una embarcación de inmenso encanto que mira, sin nostalgia ni intenciones retro, al estilo de los yates a motor de los años 60, del que Benetti fue un intérprete excepcional.
Describiendo el Benetti Motopanfilo 37M en toda su esencia exquisitamente evocadora, pero también en todas sus características estilísticas que lo convierten en un modelo atemporal, fueron Francesco Struglia, el diseñador que supervisó la disposición externa del barco, y Claudio Lazzarini y Carl Pickering, de Lazzarini Pickering Architetti, el estudio que se encargó del diseño interior.
El primer elemento que distingue inequívocamente al nuevo Motopanfilo es el volumen exterior. Francesco Struglia retoma las formas de la potencia estilística de antaño, uniendo de forma natural el casco y la superestructura en un elemento armonioso. El perfil exterior, caracterizado por cortes limpios que realzan las líneas del barco, tiene formas alargadas, elegantes y austeras. El barco es una cáscara que envuelve y protege a los que están a bordo, una verdadera envoltura arquitectónica que desarrolla, a través de una estructura de soporte mínima, un diseño que hace que la luz sea la protagonista.
Cabe destacar la Cubierta de Observación, que antes se construía alrededor del mástil central y que, a bordo del nuevo Motopanfilo, se sitúa por encima del hard-top, convirtiéndose en una pequeña cuarta cubierta para vivir en absoluta intimidad y desde la que disfrutar de una vista única, cómodamente estirado en una envolvente chaise longue para largos baños de sol durante el día y momentos de relax bajo las estrellas por la noche.
En el salón, la sustitución completa de las antiguas paredes con superficies únicamente acristaladas ha llevado a los diseñadores a decidir el uso de la madera según un nuevo esquema, convirtiéndola en la protagonista elegida para decorar suelos y techos, estos últimos caracterizados por un efecto abovedado que se convierte en doble curvatura hacia la popa gracias a un excelente trabajo de ebanistería.
La distribución incluye la suite del propietario situada en la proa de la cubierta principal y cuatro cómodas suites de invitados en la cubierta inferior, todas con camas dobles si se desea. A petición, siempre en el piso inferior, también es posible instalar una pequeña sauna.
La embarcación tiene un casco de desplazamiento optimizado para alcanzar una velocidad máxima de 16 o 18 nudos en función del motor elegido.
FB284: seis cubiertas para una vida a bordo de absoluto confort
Un bagaje de experiencia y opciones tecnológicas innovadoras son las características predominantes también del FB284, un megayate de 67 metros, imponente, autoritario y desarrollado en seis cubiertas, que realzan no sólo la verticalidad sino también la horizontalidad de todo el yate. Giorgio M. Cassetta presentó el concepto y los exteriores que diseñó, mientras que los interiores son obra del Interior Style Department di Benetti.
El único elemento que rompe deliberadamente la continuidad de la línea de la embarcación está representado por las alas del salpicadero que, realzadas en su discontinuidad respecto a las superficies circundantes, cargan de personalidad el diseño y exhiben una exquisita combinación de forma y función.
Los interiores recuerdan la excelencia intemporal del Made in Italy, que se expresa a través de la mano de obra de alta calidad, insertada en un equilibrio de elementos que logran dialogar entre sí.
En la cubierta principal, la bañera está dedicada a los invitados, que son recibidos inmediatamente por elegantes asientos. Una gran ventana, con una puerta central que se desliza en la superestructura, divide la popa del salón, que es especialmente largo, con grandes sofás y una mesa de comedor para 14 personas. En la misma cubierta, hay una amplia despensa y una gran cocina de forma cuadrada que precede a los dos camarotes VIP, que cuentan con ventanas y un considerable espacio de estiba y armarios.
Para encontrar los otros cuatro camarotes de invitados, nos trasladamos a la cubierta inferior que, al no tener que albergar la cocina, como suele ocurrir en los yates de este tamaño, amplía la zona dedicada a los camarotes de la tripulación para 17 o 19 miembros.
La cubierta superior está dedicada al propietario y a sus necesidades de convivencia. Hacia la proa, se encuentra la suite del propietario: equipada con un estudio privado y dos baños separados, uno con baño y ducha y el otro con bañera, ambos con lavabos muy largos. Debido a su posición a bordo, el camarote ofrece una vista impresionante de la proa y del mar circundante.
La cubierta del puente está diseñada como una cubierta para fiestas. La zona de sombra puede cerrarse opcionalmente en una veranda amueblada, según las necesidades del propietario. Bien disimulada, una escalera exterior conduce al solárium de casi 90 metros cuadrados. Desde el bar, hay una vista inmediata y maravillosa. Hacia la proa, un podio alberga un gran jacuzzi.
El mismo punto de vista de optimización máxima de los volúmenes disponibles ha dictado el diseño de una sexta cubierta, la cubierta inferior, que dota al yate de importantes espacios adicionales, tanto técnicos como dedicados al almacenamiento, ideales para largas navegaciones y que marcan una gran diferencia en la calidad de vida a bordo.
El FB284 es la evolución de la plataforma sobre la que se construyó el Metis, el megayate premiado de 63 metros en el que se basarán los próximos FB270, FB274 (ambos de 65 metros) y FB278 «Proyecto Fenestra» (67 metros).
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