De hecho, los aspectos más destacados del Wedgeline Ibrida 77 no se limitan a su alimentación por energía solar, sino que también tienen que ver con su cuidado diseño y su extraordinaria hidrodinámica: “El casco del 77 pies tendrá la misma anchura que el modelo de 100 pies”, explica Fabiani, “lo que significa que tendrá una estabilidad inigualable en comparación con otros barcos de la misma eslora en el mercado, que suelen tener cascos más estrechos”. Además, prosigue el ingeniero, “hemos trabajado mucho para conseguir la menor inclinación posible del eje de la hélice, con el fin de aprovechar al máximo la energía producida para empujar la embarcación en la dirección de la navegación, y no hacia abajo como ocurre con los ejes de otras embarcaciones que tienden a mirar hacia el fondo del mar”.
Además del Wedgeline Hybrid 77, Fabiani Yacht también ha diseñado el modelo 101, cuya construcción comenzará en breve y se completará en 2023. La hermana mayor tendrá nada menos que seis camarotes frente a los cuatro del modelo 77, incluido uno panorámico en la proa, y sobre todo un puesto de mando situado en el flybridge, un auténtico espacio de vida con sofás y aire acondicionado. Con el Wedgeline Ibrida 101, Fabiani Yacht ha realizado un simulacro de crucero desde Livorno a Córcega para demostrar la ausencia total de emisiones y de costes incluso en viajes largos: “Gracias al importante paquete de baterías”, explica Fabiani, “será posible viajar a 8 nudos partiendo de Livorno y deteniéndose para un baño en la isla de Capraia antes de llegar a Córcega, desde donde podremos partir a la mañana siguiente hacia Elba, para pasar una segunda noche antes de regresar a Livorno. Con el Wedgeline Ibrida 101 será posible abordar esta travesía de tres días y dos noches utilizando exclusivamente motores eléctricos alimentados por paneles solares, por lo tanto en total silencio mientras se navega y sobre todo a coste cero y sin impacto en el medio ambiente”.
La verdadera joya del Wedgeline Ibrida 101 es la plataforma patentada, que se desplaza sobre raíles especiales y puede sumergirse un metro bajo el agua o elevarse hasta el nivel del flybridge, desde donde es posible sumergirse directamente en el mar o crear un parapeto con cuerdas y puntales en unos instantes, para disfrutar de una vista impresionante del mar.